lunes, 4 de enero de 2016

historia

Historia
Uno de los establecimientos de instrucción primaría de mayor tradición en’ el medio es el Instituto José Ignacio Ordóñez regentado por las Madres Marianitas, próximamente se apresta a celebrar sus 116 años al servicio de la educación pelileña. Recordemos que en las aulas de este Instituto se educaron nuestras abuelas y  más tarde nuestras progenitoras.
En efecto en “el año dé 1886 el Concejo Municipal de Pe­lileo y el Jefe Político del Cantón, gestionaron la creación de un establecimiento dirigido por religiosas para la enseñanza de las niñas; pero este objetivo lo alcanzaron solamente en 1981” nos los recuerda el Dr. Darío Guevara en su libro “PUERTA DEL DORADO” monografía del Cantón Pelileo
El 21 de Junio de ese mismo año de 1891 se suscribió un convenio entre el Dr. Leonidas Cisneros, concejal delegado por la Municipalidad Pelileña, Dr. Félix Proaño represen­tante del señor Obispo de Riobamba el Dr. Arsenio  Andrade .y la entonces Madre Superiora de la Comunidad de Marianitas Sor Maria del Corazón de Jesús. Dicho contrato se ratificó en la sesión del 4 de Agosto del citado año. Y prosigue el Dr. Darío Guevara: “Las clases se iniciaron al cabo de cuatro meses, el primero de Diciembre, en medio del alborozo general y con la concurrencia de las autoridades cantonales y provinciales”.
A partir de entonces, el Instituto ha laborado incansablemente forjando a la niñez de nuestra ciudad, sin conocer de renunciamientos, sin amilanarse por los fenómenos telúricos, como aquel del cinco de Agosto de 1949 que redujo a escom­bros a la floreciente ciudad de Pelileo y que provocó la muerte de cinco de las madres Marianitas.
RESURGIMIENTO
Luego del cruento sismo vino la etapa de la reconstrucción. Había que comenzar nuevamente el reordenamiento de la ciudad. Se contempló ventajosamente entre aquellas, obras, la construcción del nuevo local para el Instituto “JOSÉ IGNA­CIO ORDÓÑEZ, que reinició su noble misión de educar a las nuevas generaciones, proporcionar una sólida formación académica, moral y religiosa a las niñas. Se encargan también de dotar de una profesión  segura, a la juventud que ávida de conocimientos asiste a los cursos regulares de Corte y Con­fección que imparten estas bondadosas seguidoras de la Ma­dre Mercedes Molina y Ayala, que próximamente será canonizada

ACADEMIA DE CORTE Y CONFECCIÓN
A la Academia de Corte y Confección asisten actualmente 33 señoritas. Con evidente satisfacción, al referirse a este aspecto, la Madre Gladis Aguilar  remarca: “Las señoritas que asisten a la Academia, obtienen un título que les sirve para defenderse en la vida, instalar un taller en cualquier lugar de la República y ser útiles a la sociedad. El título en mención es refrendado en los Ministerios de Educación, Previsión Social y por la Junta Artesanal”.

NECESIDADES
Frente al gran número de alumnas que llegan a 400, el plantel afronta varias necesidades. Al respecto la religiosa manifiesta: “Ojale sea posible conseguir una visera o cu­bierta para instalarla en los graderíos de la cancha depor­tiva  pintura para la planta física interna y externa del plantel, la dotación de juegos infantiles para la recreación del alumnado, él  inmediato arreglo de la calle que al momen­to se halla en malas condiciones. Solicito igualmente el cambio de los postes para el alumbrado eléctrico ya que al mo­mento estos se hallan en estado deplorable y de la misma manera la iluminación de la calle que al momento es completamente obscura.”
SUGERENCIA
Este justo pedido transmitimos a los organismos corres­pondientes, y a las autoridades municipales para que se arbitren las medidas pertinentes y  pueda solucionar algunos problemas que afronta la comunidad de Madres Marianitas.
PROMOCIÓN SOCIAL
La Comunidad de Madres Marianitas realiza también una labor de promoción social en la Florida, Ladrillo y Pelileo Grande; la instalación de asambleas cristianas en Inapí y Pelileo Grande; cumplen con la labor de catequización y pre­paración para la primera comunión con los niños de las es­cuelas de la localidad.
INFRAESTRUCTURA
El Instituto construyó una nueva edificación. Al respecto la entrevistada manifiesta: “Se ha cons­truido tres aulas para las señoritas de la Academia de Cor­te y la vivienda de las Hermanas Marianitas  Esta obra se ha realizado gracias al valioso aporte de los católicos de la República de Alemania”.